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Los 9 pasos que seguir en una Evaluación ergonómica de puestos de trabajo (I)
- 21 agosto, 2021
- Publicado por: CENEA
- Categoría: BLOG
¿Cómo hacer una evaluación ergonómica de puesto de trabajo?
Cuando de lo que hablamos es realizar una evaluación ergonómica de puestos de trabajo, ¿a qué nos estamos refiriendo exactamente?
Esta suele ser la pregunta principal que se hacen muchos responsables del área de Seguridad y Salud Ocupacional. Es tanta la información y las necesidades a cubrir en esta materia, que suele ser habitual que se vean abrumados por las opciones y la complejidad de los entornos productivos en sus empresas.
¿Qué mejor que disponer de un sencillo y útil manual de ergonomía que incluya los pasos que seguir?
Índice
Toggle¿Qué es un Manual de Ergonomía?
Hay diversidad de puestos de trabajo, muchas categorías laborales que contemplar, y un día a día cambiante que hace inevitable que un mar de dudas inunde los departamentos implicados en Ergonomía y Salud Ocupacional.
- ¿Por dónde empiezo?
- ¿Qué datos debo recoger?
- ¿Qué tipo de análisis tengo que hacer?
- ¿Qué datos organizativos y productivos necesito?
- ¿Necesito la colaboración de los trabajadores?
- ¿Qué entrevistas tengo que hacer y qué información debo extraer de ellas?
Estas son algunas de las preguntas que muchas empresas nos transmiten al ponerse en contacto con nosotros, para que les ayudemos en sus evaluaciones en clave Ergonomía.
Pero antes de que empieces con la lectura, cabe mencionar puede haber casos particulares que requieran un enfoque diferente a las pautas que te daremos, como por ejemplo, el personal que realiza asistencia sanitaria y socio-sanitaria.
Ergonomía en Hospitales y Geriátricos
Por este motivo, hemos decidido detallarte en dos artículos (al segundo tienes un enlace al final), un completo manual de ergonomía laboral que inlcuye un paso a paso para que llegues a buen puerto y sepas qué hacer en cada momento.
¿Empezamos?
¿Cómo identificar grupos de exposición homogéneos?
¿De qué hablamos cuando hablamos de puestos de trabajo?
Muchas empresas asocian el concepto “puesto de trabajo” a la “categoría salarial” (oficinistas, almaceneros, operadores de línea, operadores de mantenimiento, etc.).
Esto suele entenderse, bajo el prisma Ergonomía, como un error, porque, por ejemplo, tres personas con la categoría salarial de almacenero pueden estar en lugares distintos, expuestos a riesgos distintos.
No es lo mismo un almacenero que carga y descarga camiones que el que está asignado a realizar picking en el almacén
En este sentido, muchos profesionales han cometido el error de analizar los riesgos ergonómicos considerando los mismos “puestos de trabajo” que para evaluar los riesgos de seguridad.
Pero no es lo mismo, el concepto seguridad está relacionado con la prevención de accidentes, de imprevistos, que se derivan del lugar de trabajo, de las máquinas-herramientas con las que interactúa, de las instalaciones, pero no del concepto “puesto de trabajo”.
En este punto nos referimos a la exigencia física de trabajo a la que el trabajador está expuesto, a la actividad laboral. Por lo tanto, en este primer paso deberás identificar el contenido del trabajo de las personas, buscando un punto de vista ergonómico.
Se considerará un grupo homogéneo de exposición aquel grupo de trabajadores con un contenido de trabajo análogo, y, por tanto, con una misma exigencia física. Ése es el concepto de puesto de trabajo a trabajar.
2- Identificar qué tareas diferentes hacen los trabajadores a lo largo de la jornada laboral
Para finalizar con éxito este segundo paso, deberás responder a las dos preguntas siguientes:
- ¿Qué tareas distintas hacen los trabajadores a lo largo de su jornada laboral?
- ¿Cuánto tiempo le dedican a cada tarea a lo largo del día?
Aquí es donde suelen empezar los problemas porque cada día es diferente, depende de los pedidos, de la planificación de la producción, de los imprevistos, del número de personal del que se disponga, etc.
Para vencer la incertidumbre es necesario crear registros de producción, de organización en el trabajo, entrevistas con los responsables de producción, con los trabajadores, etc.
Aunque parezca un proceso largo y tedioso, éste es indispensable para hacer bien una evaluación de los riesgos ergonómicos.
Evaluación de Riesgos Ergonómicos
Si no se hace correctamente este paso, los demás no tienen sentido y, además, estarás tirando tu tiempo y el dinero de tu empresa a la basura.
Saber hacer bien este paso, te ayudará a conocer el impacto real de las actividades que realizan los operarios de tu empresa.
En este sentido, el factor tiempo de exposición es vital porque un trabajador puede hacer una tarea de mucha exigencia física durante poco tiempo, por ejemplo, y, por lo tanto, el riesgo de lesiones en este caso es menor.
Determinar temporalmente cuál es el patrón (ratio) trabajo/descanso
Un error muy común a la hora de resolver este paso es hacerles caso a los datos oficiales, los del contrato laboral.
Con un poco de sentido común, es fácil darse cuenta que los trabajadores de una empresa no están TODO EL RATO expuestos a esfuerzo físico. Existen:
- los descansos que estipula la ley,
- las reuniones,
- los paros fisiológicos para ir al baño,
- los tiempos de espera entre tarea y tarea, etc.
En este punto nos interesa medir el tiempo REAL de trabajo y el de descanso, para parametrizarlos y cuantificarlos.
En el caso de hacerles caso a los contratos de los trabajadores, corres el riesgo de sobrevaluar y, por lo tanto, aplicar medidas innecesarias, que, en consecuencia, le harían perder dinero y tiempo a la empresa.
Para realizar el paso tres correctamente hay que realizar entrevistas con las que determinar y consensuar las pausas que los trabajadores realizan a lo largo de su jornada laboral, de su día a día.
Valorar los parámetros productivos que impactan en la exposición
En este paso es importante señalar que cada puesto de trabajo tiene sus propios parámetros. No es lo mismo cargar cajas, que estar en una línea de producción manipulando piezas con las manos a cierta velocidad.
En el primer caso interviene el levantamiento manual de cargas, y en el segundo los movimientos repetitivos de extremidades superiores (lee aquí un caso real); por lo tanto, los parámetros productivos que impactan en la exposición no son los mismos.
¿Cómo evaluar el riesgo de un trabajador que levanta cargas en tareas secuenciales?
En este paso, lo que debes es buscar una representatividad del ritmo de trabajo habitual para cada puesto de trabajo, teniendo factores como el número de unidades procesadas por unidad de tiempo, sus pesos, la frecuencia de repeticiones de cada tipo de operación, etc.
Para ello es necesaria la colaboración del área de producción, para que te faciliten los registros de la actividad de los trabajadores. Ideal, si algun día consigues integrar el área de ingeniería de producción en la gestión de los riesgos.
En el caso de que no exista tal información, es necesario realizar un muestreo con el que conseguir dichos datos.
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Hasta aquí esta primera parte. En la segunda que puedes leer aquí, te detallaremos los cinco pasos restantes.
Muy buena información.
Muchas gracias Carmen.
Muy útiles! Gracias
Gracias a tí por añadir tu opinión, Marlin.
CENEA